Hace ya algunos años que descubrí a la gente pequeñita de Pierre Javelle and Akiko Ida, pero por unas causas u otras, había perdido la pista a sus nombres, a su página, a su trabajo. Menos mal que en Facebook (¿menos mal?) y en Twitter y en cualquier red social que este mundo (y otros) habitan, la información no puede permanecer demasiado tiempo oculta. Y así, los volví a descubrir. A redescubrir.
Este post no deja de ser una nota adhesiva, un estante nuevo en mi armario, una pared decorada de este blog. Y una advertencia: tened cuidado cuando comáis una patata asada, o deis un mordisco a una manzana. Están habitadas.
Comentarios