Latas de calamares

Me irrita esa pertinaz obsesión. Está vieja, está viejo. Tiene canas, no se le notan porque se tiñe. Está más gorda, está más flaco. La piel se le arruga, las manos se le adornan de lunares marrones. 
Todos envejecemos. Todos. Malo si no es así, sólo hay algo que pueda detener de forma eficaz el proceso. 
Por muchas cremas, cirugías, dietas, tablas de gimnasio, pesas, yoga, pilates, salto a la comba y salto mortal. El proceso se va cumpliendo día tras día, semana a semana. Por eso. 
Cuando tienes el privilegio de ver a un músico que lleva muchos años (más años que el imberbe que se encierra en la limusina para escapar de sus tres o cuatro fans, angelico) ejerciendo como tal y le ves, más mayor, con más matices, con algún achaque de última hora, salir, cantar, emocionar, conversar, hacerte feliz por unas horas. Con la cabeza en alto y la dignidad intacta.


El tiempo da y quita. Suma y resta. Añade pátinas. Revela soledades y aclara sobreentendidos. Dice Manolo que el tiempo no existe, sólo nosotros pasando por él. No sé, será que no soy poeta, como él. Sólo sé que el pasado jueves, en los miles de personas que tuvimos el placer de verle, de escucharle, de gozar del espectáculo (bailarina, músicos, decorado, luces, la voz de prodigio de Manolo) inyectó una suerte de optimismo, una suerte de alegría. De ánimo. De ganas de remangarnos y ponernos a trabajar. De protestar porque unos pocos comen latas de caviar mientras los demás comemos (los que podemos) latas de calamares. 

Comentarios

Jésvel ha dicho que…
Pues sí, creo que Manolo tiene razón: somos nosotros los que pasamos por el tiempo... ¡toma filosofía! (creo que es la física la que lo corrobora, pero lo guay es la filosofía, ¡que yo soy de letras!).

Por cierto, yo me sumo a la protesta, aunque conste que me importa un bledo que hay quien coma caviar, lo que no soporto es que les incomode (y no digamos nada de lo que hacen para evitarlo) que los demás podamos comer, no ya una lata de calamares, sino un pobre cantero de pan.
María Antonia Moreno ha dicho que…
Completamente de acuerdo, Jésvel. Un abrazo.