Un corazón maltrecho en mitad de un día azul |
No hay nada mejor que hacerse mayor para empezar a anhelar todo. Lo que fue y no será. Aquello que, intuimos, no existe. El amor, ese, el de las novelas. La primavera. Que vendrá, como todos los años. Y en febrero, se empieza a añorar. Las que se fueron. Las que nunca serán.
Y hasta anhelamos (nosotros, que cogemos frío si nos mojamos) bailar bajo la lluvia, jóvenes, sin miedo.
Todo por un breve chispazo amarillo entre el secarral. O por un corazón maltrecho.
*****
Corazones que nos encontramos, un día sí, otro también.
Foto de Mª. Antonia Moreno.
Comentarios
http://libros.com/crowdfunding/los-trabajos-y-los-dias-lorenzo-silva/