Cubiertas y libros

Hay libros que prometen mucho. Los abres y no son nada.
Hay cubiertas grises y anodinas que esconden todo un mundo azul.
Hay historias que te hacen reír, con las que te sientes cómplice, amigo. Pero, sin previo aviso y a partir de la página 82, caes en la cuenta de que no merecieron el tiempo que les dedicaste. No eran como se anunciaban. Les entregaste demasiada atención. Te preocupaste mucho por la suerte de los protagonistas. Y total, para qué. Las historias, a la postre, no merecían la pena.
Pero, por fortuna, hay relatos esplendorosos que se agazapan bajo cubiertas a una tinta. Y el tiempo que se merecen es infinito.

Comentarios

Portfolio ha dicho que…
Pido permiso para entrar en su casa. Me llamo michelle y tambien tengo cuentos que contar, pero mi casa esta cerrada por el momento, bajo remodelaciones. Le prometo que cuando la reabra, usted sera de las primeras invitadas. Por ahora, con sus cuentos descanso sobre un almohadon de plumas, sueño con Manolo Garcia susurrandome una frase dulce y me inspiro.
Hasta la proxima...
Isabel Barceló Chico ha dicho que…
Hace años que ya no leo lo que no me interesa. Le doy unas cuantas páginas al libro, pero si llego a la 40 ó la 50 sin que haya logrado interesarme, me despido de él sin ningún pesar. No estoy ya para desperdiciar mi tiempo. Besitos, querida amiga.
María Antonia Moreno ha dicho que…
Violeta, permiso, por supuesto, concedido. A la espera de que las obras en tu casa concluyan, siempre puedes quedarte por aquí.

Saludos
María Antonia Moreno ha dicho que…
Isabel completamente de acuerdo, haces muy bien. El tiempo no está para perderlo.

Un beso
argamenon ha dicho que…
No, lo siento, Doña María Antonia. En esto no consigo estar de acuerdo con usted. Los libros son, en mi opinión, lo que cada uno de los lectores queremos, pretendemos o, en el peor de los casos, conseguimos que sean. No los hay ni buenos ni malos, ni interesantes ni aburridos. Tampoco los hay pesos pluma, que por su ligereza dan pena terminarlos y nos lo bebemos a sorbos pequeños, ni pesos pesados, imposibles casi siempre de mantener sobre las manos.
Los libros son lo que cada uno de nosotros, lectores, queramos que sean; y hay tantos, que perder el tiempo en descifrar lo indescifrable no deja de ser una lamentable pérdida de tiempo.
No sé si leo lo mejor. Sólo sé que leo lo que me pide el alma, aunque, pobre de mí, ignore en demasiadas ocasiones autor y título del texto.
Anónimo ha dicho que…
Igual sucede al parecer con las personas.

Cecilia
Dara ha dicho que…
Es el ser lo que en realidad no son. Ya se sabe, las primeras impresiones no significan nada.



Miau
María Antonia Moreno ha dicho que…
Hola, argamenón. Bien, interesante su opinión, sí. Un saludo
María Antonia Moreno ha dicho que…
Hola, Cecilia. Cierto. Con las personas, puede ocurrir también así.
Un abrazo
María Antonia Moreno ha dicho que…
Cierto, Dara Scully. Bienvenida y saludos