Manuel Coy


Llegó el tiempo de la lluvia. Se acerca noviembre, está a la vuelta de la hoja del calendario. Y me acuerdo de aquéllos que tienen corazón de noviembre, como Ismael ... o Manuel Coy.
Manuel Coy es un hombre sencillo, que no simple, que sabe cuál es su derrota, su presente y acierta cuál será la línea de lo que está por venir. La que hará que roce la quilla con un escollo traicionero. Bebe ginebra azul. Lamenta que los hombres se pudran en tierra, como los barcos viejos que ya no sirven. Sabe cómo son las mujeres de verdad, aunque sean malas y porque lo son. Y mira con ojos de perro fiel.
Coy, que quiere contarle las pecas a Tánger; él, que sabe de estrellas y rutas, no acierta a componer la carta naútica de la mujer.
Es mala y peligrosa, pero es tu derrota, marinero. Un tesoro, una aventura, un amigo, un mar legendario y una mujer hermosa, dorada y enigmática, como la primera mujer. Y un marino que quisiera parecerse a Corto Maltés, guapo, aventurero, enigmático. Murcia, Cartagena, el cementerio de los barcos sin nombre, Punta Percheles, el Cabo Tiñoso, Cádiz y La Caleta. Y el mar.

Comentarios

Cecilia ha dicho que…
Yo es aquí mejor no comento porque si comento y digo lo que pienso te cabreas...así que me callo y no digo que el Coy es un blandito de pronóstico y un menda que se merece dos leches bien dadas.... por éso, para que no te enfades no digo nada, pero vamos, que podría decir también que es un triste y que se merece por tonto todo lo que le pasa, y que entiendo a Tánger perfectamente, que para perritos falderos ya tengo a los de cuatro patas...

Pero vamos, que no he dicho nada... Conste...

Eso.

(Donde esté Corso, dónde esté Quart....ay...)
Anónimo ha dicho que…
Pero cómo eres...
...
Ya hablaremos ya

Y él no es tonto y sabe perfectamente, lo que le pasa, lo que le va a pasar y lo que le ha pasado. Punto.

Ea.
Yo
Cecilia ha dicho que…
Pues por éso es tonto. Porque lo sabe y vá, como un cabestro....
argamenon ha dicho que…
Pues a mi, lo siento, me encanta el bueno de Manuel.
Si uno llega a saber cual es su derrota. Si llega a aceptar sin resignación ni demasiada amargura cuál sea la línea que está por venir, incluso asumiendo, sin desagrado, que su quilla roce con un escollo tan traicionero como conocido. Si además se permite el lujo de beber ginebra azul, y para colmo sabe cómo son las mujeres, incluso las malas. ¿Qué más se puede pedir a esta vida?
¿Se puede pedir que lo hombres no se pudran bajo tierra como los barcos? Seguro que sí. Pero ¿qué más dará? Para cuando uno se de cuenta de que se está pudriendo bajo tierra ya no valdrá la pena pretender lo contrario. Lo que sí vale la pena de verdad es, como Manuel, pretender cada día y todos ellos contarle las pecas a Tánger, y tratar de adivinar, aunque de lejos y con mil errores y sacrificios, la cauta náutica de la mujer, y para colmo vivir de cara al mar. Con miedo, más miedo que nadie, y con toda la libertad del mundo, esa que te mira de reojo y te deja, cuando te deja, hacer lo que tú quieres a pesar de los vientos.
Me encantó leerte.
Isabel Barceló Chico ha dicho que…
Este Manuel se me presenta como un personaje bastante enigmático y muy romántico. Sobre todo por esa voluntad de mar, pese a la ignorancia, y ese deseo de mujer, aunque las mujeres reales que se le acerquen no se parezcan en nada a las soñadas. O quizá sí sueña con esas mujerees reales, entradas en carnes, descaradas y vocingleras y eres tú quien sueña que él sueña con mujeres rubias. En fin, ya digo, me quedo sin saber. Un beso enorme.
Sirena Varada ha dicho que…
Como Belinda ha abierto la caja de los truenos me aventuro a decir que a mí tampoco me gustan nada los hombres sencillos con mirada de perro fiel. Cuanto más complicados mejor, y si puede ser con un punto indomable, sinuoso, taciturno, imprevisible, enigmático, pasional... mejor que mejor. En cuanto a la mirada; en la misma línea; a ser posible inescrutable. Y mucho me temo que ese personaje no es Manuel

(Belinda, hago causa común contigo... Que yo tampoco he dicho nada)
María Antonia Moreno ha dicho que…
Bueno... creo que, Isabel, Sirena... ¿Por qué no le echáis un ojo a La carta esférica? A fin de cuentas, ya sabéis, Manuel Coy es un personaje prestado, alguien que me apropié en estos días y estos años...

Un abrazo para todos, gracias por estar, leer y comentar... (hummm, aunque a veces, no estemos de acuerdo, je je, gracias, agamenón...)
argamenon ha dicho que…
No, por favor. No renuncio a mi "r" de soñador y marino aventurero que pudiera hacerme estar más cerca del bueno de Manuel que el resto de las comunicantes. De ahí precisamente me viene mi pasión por el mar, de mi condición de argonauta.
Cecilia ha dicho que…
SIRENA, ¡¡¡¡A MIS BRAZOS!!!!

Lo del punto indomable, sinuoso, pasional, etc me ha encantao...me lo pido...
María Antonia Moreno ha dicho que…
Perdón argamenón... Fue un error al escribir, por supuesto, of course, con r, con r...

Saludos!!!!!
María Antonia Moreno ha dicho que…
Sirena, Belinda... Coy también es "un punto indomable, sinuoso, taciturno, imprevisible, enigmático, pasional... "

Y si no, echadle un vistazo a La carta esférica, a la fuente, a la fuente...
Cecilia ha dicho que…
Permíteme: Coy, indomable? Sinuoso? ENIGMÁTICO?
María Antonia Moreno ha dicho que…
¿Y no es imprevisible? ¿Ni pasional? ¿Ni taciturno?????