Su amor suma soledades. La de ella y la de él. Suma soledades en las tardes cortas cuando la luz huye, roja. Entre aromas de tinta y papel nuevo. El uno junto al otro, al lado de la ventana, en una mesa larga como el invierno. Soy la espectadora de un amor crepuscular que suma ausencias. Se miran y la luz parece volver desde el horizonte, blanca. Ella se arregla para él y se maquilla la mirada con ilusiones nuevas. Él se viste para ella y se fija el pelo con la loción que hace regresar a los sueños. En un rincón cualquiera de la biblioteca. Entre estantes de libros e imágenes fijas del león en las estepas. Sólo soy la bibliotecaria que observa este amor que parecía que no pero es que sí. Llegan juntos y se llevan músicas de boleros y canciones lentas como el cariño profundo. Se miran a los ojos y se escucha su música interior. Es la suma de una soledad dolorosa y un dolor de soledad. Se unieron y ahuyentaron los fantasmas. Les veo desde mi mostrador, al lado de una ventana cualquiera, en un rincón de la biblioteca. Quisiera creer que es para siempre. Que se entenderán y dirán adiós a las noches sin sueños. Que ella siempre tendrá en los ojos el maquillaje eterno de una ilusión imperecedera. Y que él lucirá el pelo impecable, envolviendo su cabeza un montón de sueños hermosos. Quién sabe. Tal vez acabe cuando llegue la primavera y las tardes sean largos desfiles de luz azul. Cuando se escuchen las risas de los niños en la plaza y se aturdan con la juventud de los demás que vendrá a recordarles la suya, que está perdida. Pero en realidad no importa. Importan estos días que suman y no restan. Estas tardes compartidas entre películas de acción y versos de poetas. Entre los viajes a Japón de las guías turísticas y el zumbido del ordenador que ventila las tristezas. En medio del 2 a 0 del partido del domingo. Cuando entrelazan sus manos con disimulo de mayores y la calma de un amor tardío. Aquí, en un rincón cualquiera de la biblioteca.
Comentarios
bueno, creo que a veces necesitamos llenar vacíos y si la otra persona también... es legítimo! siempre que los dos lo sepan...
en este caso creo que hay ganas de ilusiones... y eso es también legítimo...
saludos para ti también
besos
bienvenida siempre amiga
besitos
Besitos de hada!
creo que sí que es algo así
besos
has conversado con ciudades cansadas de dormir?
pues no... me temo que la noche me sorprende durmiendo... soy más de mañana, del aire transparente y el sol que acaricia los tejados de la ciudad...
bienvenido, un saludo